
No aspiro a la verdad.
No busco, ni siquiera, ese leve sosiego
que cubre a las heridas
de vuelta y tras los años.
Es difícil el aire bajo esta marca errada,
de no sé qué destino,
de no sé qué justicia.
Exhalo las palabras a la calle,
el tibio parpadeo de un instante vivido
como ese mar borroso que me explica
a través de los restos que dejo de mis pasos.
No lloro, no podría hacerlo,
me duele la consciencia de todo lo inmediato:
esta esquina inmutable ahora,
esta atmósfera lenta y transitoria,
donde pierde el lamento su sentido,
pero ya no su inercia.
José Ángel García Caballero
(en "La bolsa de pipas", Palma de Mallorca, abril de 2008)
uf... me quedo sobrecogido, muchas gracias, claro que tienes permiso para poner ese texto... (pero si lo de loewe lo dejamos en adonais, mejor... :)
ResponderEliminarmuchas gracias, te debo un gintonic por lo menos, :)
Mil perdones. Ahora mismo lo cambio.
ResponderEliminarCon un gintonic y un chupito de "cassalla" me conformo.